Sale en estos días un nuevo libro: Bioética Narrativa. De
Tomás Domingo Moratalla y Lydia Feito. En la editorial Escolar y Mayo. Un libro
para pensar sobre un tema quizá no muy conocido, pero que tiene un enorme
desarrollo y que se muestra como uno de los campos más interesantes y creativos
de la ética actual.
En la
medicina y en la ética se ha ido desarrollando desde hace ya años una
perspectiva narrativa que trata de enfatizar cómo la comprensión de los
problemas y asuntos humanos necesita entenderse desde lo concreto, la
experiencia vivida, el contexto, la situación. Cómo los eventos cobran sentido
dentro de historias complejas, cuya trama es la que permite interpretar lo que
sucede.
Así,
la medicina narrativa trata de formar a los profesionales, dotándoles de una
“competencia narrativa” que supone la capacidad de trabajar con los relatos de
los pacientes, generando un proceso de comunicación y empatía con gran riqueza,
al entender el sufrimiento de las personas desde la expresión que ellos mismos
realizan y desde el sentido que atribuyen a la realidad vivida.
Por su
parte, la filosofía ha realizado un giro hermenéutico, que supone poner en
cuestión los grandes programas de fundamentación clásicos, a los que critica su
presunta validez universal. Frente a ellos promueve la interpretación como
clave esencial, y dentro de ella, la narrativa se convierte en un modelo
nuclear para generar un tipo de reflexión basada en la expresión de sentidos a
través de lo narrado. En ética esto tiene importantísimas repercusiones, pues
ya no podrá hablarse de unos principios o normas abstractos, que se apliquen a
los casos particulares. Antes bien, será necesario atender a la particularidad
de la situación y de la vivencia de sentido, a fin de poder comprenderla y
actuar en consecuencia. El marco de la toma de decisiones se altera y modifica,
introduciendo factores experienciales y contextuales que son más afines a un
modelo deliberativo, incierto, abierto y constructivo. Será un espacio que no
repare en desarrollar las posibilidades de la creación, la imaginación y la
expresión.
El caso será, por tanto, la
historia, la biografía de alguien, un relato narrado de una vida, dentro de la
cual cobran sentido los acontecimientos, las decisiones y sus consecuencias. La
propia identidad se construye en forma de relato y, con él, reconfigura y da
nuevo sentido a su propia vida, sirviendo la narración de motivo de revisión y
reconstrucción, en un proceso de ida y vuelta que va enriqueciéndose,
profundizándose y generando nuevas perspectivas.
Este
libro aborda todas estas cuestiones, centrando su atención en la bioética
narrativa. Está estructurado en tres capítulos: el primero de ellos analiza el
paradigma narrativo, sus características y sus principales representantes. En
el segundo se presenta la bioética como ética aplicada que se combina, en el
tercer capítulo, con lo narrativo generando una síntesis novedosa y llena de
posibilidades: la bioética narrativa.
El
libro puede adquirirse directamente en la editorial Escolar y Mayo, que es
también librería, y que dispone de una página web con venta directa online
(www.escolarymayo.com)